19 oct 2009

RECETAS DE HALLOWEEN

En Irlanda es típico, para todas las familias, preparar un platillo llamado “Colcannon”.

COLCANNON

INGREDIENTES PARA 4 PERSONAS:
1 kg de patatas
200g de mantequilla
400 gramos de tocino
1 col (repollo)
1 vaso de cerveza
4 cebollas
Sal y pimienta

PREPARACIÓN:
Se pica la cebolla fina y se pone a sofreír con el tocino cortado en trocitos pequeños, lentamente se dejan dorar sin secarse.
Aparte se hierven las patatas y luego se pelan y se hacen puré, tratando de que quede cremoso.
Se le añade entonces la mitad de la mantequilla, para que adquiera una consistencia de manteca, y se pone a dorar, lentamente, remojando con un poco de cerveza cuando parezca secarse demasiado.
Se salpimienta al gusto.
Se cuece la col.
En una sartén se derrite lo que queda de la mantequilla.
Cuando todo esta listo, se sirven un par de cucharadas de puré y un poco de col, cebolla y tocino.
Para terminar, se riega con la mantequilla fundida (puedes saltarte este paso si no te gusta mucho la mantequilla).
Ahora puedes disfrutar tu colcannon :)


El colcannon puede ser comido tanto en Samhain como en otras festividades irlandesas.






CÓMO HACER UNA CALABAZA DE HALLOWEEN

Si no quieres comprar calabazas de plástico o fieltro para adornar tu casa, siempre puedes ir al mercado para adquirir algunas calabazas de la frutería, y seguir el método tradicional celta: abriéndolas y modelándolas hasta crear rostros que den miedo.

Es muy fácil hacerlo, sólo tienes que seguir estos pasos:
Antes de tomar el cuchillo, será buena idea practicar sobre un papel hasta crear los diseños que luego trasladaremos a la calabaza.

Con un cuchillo pequeño, a ser posible de sierra, abriremos la calabaza por arriba, dándole cierta inclinación al borde, para que, después, la parte que hemos cortado nos sirva de tapa.
Nos aseguraremos de que el agujero es lo suficientemente grande como para poder meter la mano dentro.

Con una cuchara grande, quitaremos la carne de la calabaza, dejando sólo unos pocos centímetros de grosor de pulpa.

A la hora de hacer las secciones para la cara de la calabaza, cortaremos de menos a más (primero las piezas más pequeñas) y de dentro hacia afuera. Cortaremos siempre perpendicularmente a la cáscara de la calabaza.

Si hay zonas que se resisten, es mejor retirar el cuchillo y volver a meterlo, ya que los cortes muy continuos pueden romper los dibujos más angulosos. Una vez cortado todo, empujaremos levemente las figuras cortadas desde fuera hacia el interior.

Para terminar, cortamos un círculo en el fondo, asegurándonos de que es del mismo diámetro de la vela que llevará la calabaza en su interior. Podemos tapar la calabaza después, pero es conveniente hacer un pequeño agujero para que salga el humo de la vela.


SAMHAIN

(31 de octubre - 1 de noviembre)

Entre los antiguos celtas, esta fiesta indica el final del verano y el comienzo del invierno. Samhain (se pronuncia sowin) significa "fin del verano", y es un momento muy importante, ya que los celtas dividían el año solo en 2 partes: invierno y verano.

Samhain era el fin del año viejo y el comienzo de un año nuevo: de hecho para los celtas el año se iniciaba con su parte fría y oscura, en la que la Antigua Madre reposaba bajo la nieve. Del mismo modo, para los celtas, el día se iniciaba con la noche y no con el alba, por lo que las fiestas célticas comenzaban al ponerse el sol el día anterior.

En la tradición celta, el día que marcaba el fin de una estación y el comienzo de otra, no era parte de ninguna de las dos, por lo que no era definida como pasado ni futuro, sino como un “tiempo más allá del tiempo” durante el cual era posible, si estaban preparados, entrar al Otro Mundo. Del mismo modo, era posible que los seres mágicos y los espíritus entraran a nuestro mundo.

Se cuenta que en esta noche, las muchachas del pueblo grababan en avellanas el nombre de los hombres que todavía eran solteros y luego las tiraban al fuego; la avellana que saltaba fuera de las llamas indicaba a cada muchacha cual iba a ser el futuro esposo.

La fiesta de Samhain fue cristianizada como “Todos los Santos” por el papa Gregorio IV en el año de 834.



TRADICIONES DE HALLOWEEN

Existen diversas tradiciones asociadas al periodo de tiempo comprendido del 31 de octubre al 2 de noviembre.

Cada cultura expresa la relación entre el mundo de los vivos y el mundo de los muertos en una forma diferente.

En la tradición irlandesa, durante la noche de los difuntos, en los cementerios se colocaban una gran cantidad de quinqués encendidos, para transformar el lugar de la muerte en un sitio luminoso.

Otra tradición muy popular, consiste en dejar, ya sea la noche del 31 de octubre al 1 de noviembre o en la siguiente, la mesa puesta, con diferentes tipos de alimentos.

En algunos pueblos era costumbre poner en el alféizar de las ventanas una pequeña calabaza llena de vino para saciar la sed de las almas nocturnas.

El hábito de dejar alimento para los muertos tiene un origen arcaico en Grecia. Durante la fiesta celebrada en honor a Dionisio se preparaba una comida a base de cereales y luego se dejaba en unos hoyos cavados en un terreno.

En Venecia, hacia el año de 1581, existía la creencia de que a los cadáveres había que enterrarlos boca abajo, con el fin de que en la noche del 1 de noviembre no pudieran levantarse para llamar a los parientes.

Actualmente, entre los paganos, existen aun muchas costumbres relacionadas con esta fiesta. Todavía se suelen levantar fogatas y ofrecer festines en honor a los seres queridos fallecidos y a los dioses. En las ventanas se pueden colocar velas negras con el fin de ahuyentar las energías negativas o espíritus malignos.

Como en la antigüedad, para los celtas, el Halloween (Samhain) marcaba el final de la temporada de cosechas, así como el comienzo del invierno, se aprovechaba esta fecha para dar gracias por todo lo que se había recibido ese año. Hoy en día, esto se hace de manera más simbólica, refiriéndonos a “cosechas” en sentido figurado (ejemplo: trabajo, familia, salud, etc.).

Las calabazas son también un símbolo del Halloween y existe una leyenda acerca de ella: La leyenda de Jack O’Lantern.


ORÍGENES DEL HALLOWEEN

Los orígenes del Halloween se remontan a la antigua fiesta celta llamada Samhain (se pronuncia sowin).

Hace 2000 años, los celtas habitaban el área que hoy en día es Irlanda, Reino Unido y el norte de Francia. Ellos celebraban su año nuevo el 1 de noviembre. Este día marcaba el final del verano y el tiempo de cosechas, así como el comienzo de una época más oscura y fría: el invierno. Esta estación era asociada frecuentemente con la "muerte".

Los celtas creían que en la víspera de año nuevo, el velo entre el mundo de los vivos y el mundo de los muertos se hacía mucho más delgado, por lo que se creía que en la noche del 31 de octubre los espíritus desencarnados podían regresar a la tierra. Claro que, así como podrían aparecer espíritus buenos, también podrían regresar espíritus no deseados.

Los celtas aprovechaban este tiempo para comunicarse con ellos y hacer predicciones sobre el futuro.

Para conmemorar este evento, los druidas hacían enormes fogatas y la gente se reunía alrededor para ofrecer sacrificios a sus deidades.

Durante la fiesta, los celtas vestían disfraces, usualmente cabezas y pieles de animales.
Cuando los romanos conquistaron la mayor parte del territorio celta y lo habitaron (durante 400 años), dos de sus festivales se combinaron con la tradición original de Samhain. Estos festivales eran Feralia y Pomona.

Al pasar el tiempo, el cristianismo comenzó a difundirse por todas las tierras celtas. En el siglo Vll, en un afán por convertir a los paganos en cristianos, el papa nombra al 1 de noviembre como "Día de Todos los Santos" (All Saint's Day), un momento para honrar a los santos y mártires.

La nueva celebración fue también llamada "All-hallows" y por lo tanto, a la víspera de ella (el 31 de octubre) se le llamaba "All-hallows Eve", que en español significa "Víspera de Todos los Santos", de donde se deriva el nombre de "Halloween".

Ya mas adelante, en el año 1000, la iglesia decidio hacer un "All Soul's Day" (día de todas las almas), el día 2 de noviembre, para honrar a todos los muertos. Este era celebrado en forma muy similar al antiguo Samhain, con grandes fogatas, desfiles y disfraces de angeles, santos y demonios.

En conjunto, a las 3 celebraciones (La víspera de todos los santos, el día de todos los santos y el día de las almas) se les llamaba Hallowmas.